La Confederación de Choferes de Bolivia ratificó el paro nacional indefinido que anunció a partir de este miércoles 2 de abril, en demanda de la normalización del suministro de combustibles en los surtidores del país y la destitución de presidente de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), Marcel Claure, y del viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, entre otros.
El máximo dirigente de esa entidad sindical, Lucio Gómez, explicó que al no haber respuesta a sus demandas y habiéndose cumplido el plazo de 72 horas que los choferes le dieron al gobierno para atención favorable de las mismas, el paro es inminente y adelantó que el mismo será contundente.
“El término de las 72 horas se ha cumplido, queremos decir hasta esta mañana no teníamos ninguna respuesta, ninguna documentación”, dijo Gómez en conferencia de prensa.
“Se respeta la última resolución del ampliado de Sucre, que ratifica el paro para el día miércoles”, agregó.
El paro nacional indefinido, que incluye la amenaza del cierre de fronteras, ha sido anunciado por los choferes hace al menos 15 días, con el reclamo inicial de la normalización del suministro de combustibles en todo el país. A esa demanda se sumó el reclamo por la subida de los precios de la canasta familiar y la destitución de las autoridades mencionadas.
Gómez explicó en su conferencia de prensa que poco antes del inicio de la misma había recibido una carta del Ministerio de Hidrocarburos que contenía información sobre los volúmenes actuales de distribución de combustible en todo el país y precisó que las autoridades de la ASFI también le entregaron información sobre las deudas de su sector.
Ante las consultas de los periodistas, Gómez dijo que los choferes acordaron una reunión con la Asociación de Bancos Privados de Bolivia, la ASFI y el Ministerio de Economía para tratar los temas relativos a las deudas, con el propósito de encontrar salidas para sus afiliados, pero lamentó no haber recibido comunicación alguna del Ministerio de Obras Públicas.
