Transportistas denuncian escasez de diésel y el Gobierno asegura que el abastecimiento es normal, pero la tensión sigue creciendo
La escasez de diésel encendió nuevamente las alarmas en Bolivia. Este miércoles, choferes del transporte pesado instalaron un bloqueo en la carretera La Paz–Oruro, en el sector de Achica Arriba, en protesta por la falta de carburantes. En paralelo, en la ciudad de La Paz, cientos de vehículos forman largas filas en las estaciones de servicio, en busca de combustible.
“Estamos molestos por la provisión de diésel, no podemos generar recursos y nos sentimos perjudicados”, declaró el transportista Ramiro Choque desde el punto de bloqueo. El grito unánime de los movilizados fue “¡queremos diésel!”, mientras camiones, buses y otros motorizados permanecen varados en ambos carriles de la vía, una de las más transitadas del país.
Los choferes aseguran que llevan dos días sin poder abastecerse. Algunos incluso han dormido en sus vehículos, esperando una cisterna. “Vamos a continuar hasta que llegue el diésel, incluso vamos a radicalizar estas medidas”, advirtieron los movilizados.
Desde el Gobierno, sin embargo, se asegura que el suministro es normal. La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) informó que se despachan diariamente más de 1.800.000 litros de diésel y 1.900.000 litros de gasolina solo en el departamento de La Paz. “La generación de filas se debe a una susceptibilidad, a una especulación por los anuncios de bloqueos”, explicó Nelson Lamas, jefe de la Unidad de Análisis y Evaluación Técnica de la ANH.
En la urbe paceña, el panorama no es menos preocupante. Conductores aseguran haber esperado hasta 24 horas para cargar combustible. “Necesitamos el diésel para trabajar, para alimentar a nuestras familias. No podemos seguir así”, comentó uno de los afectados en una estación de servicio.
La ANH también atribuyó demoras puntuales a las condiciones meteorológicas adversas en el Puerto de Arica, donde las marejadas habrían dificultado la descarga de combustibles. Mientras tanto, la presión crece en las calles y carreteras del país.
Fotos: APG.
