La auditoría chilena reveló falta de garantías en la inocuidad de los productos bolivianos destinados a exportación.
El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile suspendió el proceso para autorizar la exportación de leche boliviana tras detectar fallas estructurales en el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (SENASAG). La decisión se tomó luego de una auditoría técnica que evidenció que Bolivia no garantiza la inocuidad de los productos lácteos.
La observación central recae en la Unidad de Inocuidad Alimentaria, debilitada por despidos masivos ordenados por el actual director nacional, Miguel Quiroz Ugarte. Según el informe chileno, esta unidad no logró demostrar la existencia ni aplicación de un Plan Nacional de Residuos de Medicamentos Veterinarios, requisito clave para la exportación.
El freno a las exportaciones no solo afecta al sector lechero, que atraviesa una crisis por altos costos de producción, inundaciones y contrabando, sino que también genera dudas sobre la confiabilidad de las certificaciones del SENASAG para otros productos como carne o castaña.
“¿Son seguros los productos certificados para el consumo interno? ¿Se pone en riesgo el prestigio institucional del SENASAG?”, son algunas de las interrogantes que emergen en medio de un clima económico ya golpeado por la escasez de dólares y combustibles.
Medios nacionales intentaron obtener una respuesta oficial del SENASAG, pero no fue posible contactar al ejecutivo por su participación en un evento internacional en Santa Cruz.